EL
EMBAROZO EN LAS ADOLECENTES
Embarazo adolescente o embarazo precoz es aquel embarazo que
se produce en una mujer adolescente: entre la adolescencia inicial o pubertad
comienzo de la edad fértil y el final de la adolescencia. La OMS establece la adolescencia
entre los 10 y los 19 años. La mayoría de los embarazos en adolescentes son
considerados como embarazos no deseados, provocados por la práctica de
relaciones sexuales sin métodos anticonceptivos.
En general el término también se refiere a las mujeres
embarazadas que no han alcanzado la mayoría de edad jurídica, variable según
los distintos países del mundo, así como a las mujeres adolescentes embarazadas
que están en situación de dependencia de la familia de origen.
El embarazo en una mujer adolescente puede llegar a término,
produciéndose el nacimiento, o interrumpirse por aborto, ya sea éste espontáneo
o inducido, en éste último caso de manera legal o ilegal dependiendo de
legislación de cada país.
Un embarazo en la adolescencia cambia totalmente el proyecto
de vida y pone en riesgo la salud de la madre y del hijo.
Las complicaciones por embarazos durante la adolescencia
cobran miles de vidas maternas y cada año mueren más de un millón de bebés de
madres adolescentes y el problema es muy claro, aún su cuerpo no está preparado
para concebir un hijo.
La espera y llegada de un hijo o una hija es un
acontecimiento maravilloso que genera enorme felicidad a los padres y
familiares, sobre todo cuando este embarazo fue deseado y planeado ya que
implica una enorme responsabilidad y madurez.
Pero desafortunadamente, en ocasiones este acontecimiento
milagroso que permite darle sentido a la vida, se convierte en una carga y en
un sentimiento de culpa, miedo y rechazo que afecta la vida en todos los
sentidos y es que un embarazo no deseado, genera siempre preocupación, temor y
hasta enojo, que generalmente termina por lesionar a quien menos lo merece: el
bebé.
Lo preocupante de este problema es que a pesar de la
información y de los medios existentes para evitar un embarazo, la cifra de
jovencitas menores de 19 años, que se embarazan o que ya tienen hijos, aumenta
día con día, de tal forma que solamente en México se reportan más de un millón
de ellas.
Este problema afecta a jóvenes de todos los niveles socioeconómicos
y educativos, por lo que es importante reflexionar muy bien, sobre todo
respecto a lo que implica no solamente un embarazo, sino el tener un hijo o
hija en una etapa de la vida en que se está físicamente en pleno desarrollo,
emocionalmente se empiezan a expresar y a definir sentimientos afectivos y
sexuales y socialmente se está estructurando un proyecto de vida, necesario
para poder llegar a la vida adulta con la preparación adecuada, para salir
adelante en todos los aspectos y roles que se presentan.
El impacto del embarazo en la adolescencia además de los
riesgos físicos, ocasiona un mayor número de abortos o bebés muertos o con
problemas congénitos y es también psicosocial, ya que se traduce en deserción
escolar, mayor número de hijos a lo largo de su juventud, desempleo o ingresos
inferiores de por vida, generalmente fracaso en la relación de pareja y
abandono de la vida social con todo lo que ello significa.
Los problemas que genera un embarazo no deseado o
sorpresivo, no solamente tienen consecuencias para las mujeres, sino también
para los padres que en muchos casos también son adolescentes, pero en otros son
adultos, casados o parientes de las madres, lo que implica por supuesto otro
tipo de problemas que son los legales, ya que el acoso, el estupro, el incesto,
la violación o el abuso sexual, son actos castigados.
El ser padres durante la adolescencia también representa una
carga para las familias, que tienen que apoyar y ayudar económica y
emocionalmente a los jóvenes, que en muchas ocasiones tienen que vivir con
ellos, lo que también afectar la libertad en la relación de pareja.
Otro de los problemas, es el rechazo social o religioso,
cuando el embarazo se ha dado fuera del matrimonio, porque si bien, en algunas
familias este concepto es más flexible y llega a ser hasta tolerado y aceptado,
en la mayoría de ellas sigue siendo considerado como no deseable,
fundamentalmente por cuestiones morales y religiosas, que consideran
inadecuadas las relaciones sexuales fuera del matrimonio.
Pero el principal problema social, es generado por que tener
un hijo o una hija que representa compromiso, sacrificio y abandono de muchas
actividades que deben ser parte del desarrollo normal de los y las adolescentes
y esta frustración de su proyecto de vida, termina por perjudicar enormemente a
quienes no tuvieron nada que ver con una decisión o equivocación apresurada
Nombre: Fernanda López
Curso: 1ro ciencias "D"
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